pimientos rojos asados

Dificultad: Muy fácil

pimientos rojos asados - listos para servir

Ingredientes para 4-6 personas:
– 3 – 4 pimientos rojos grandes
– aceite de oliva virgen extra
– sal gorda
– vinagre

Qué vas a necesitar:
– 1 fuente de barro o de cristal (pero mejor la primera)

Ideal para…

Es una receta muy fácil de hacer y como acompañamiento es ideal para carnes, una tortilla de patata e incluso para servirlo como aperitivo con un poco de pan tostado, por ejemplo.

¡Vamos con la preparación de estos pimientos rojos asados!

Preparación de la receta

Lo primero de todo es lavarlos con agua y secarlos un poco.

Enciende el horno para que se vaya calentando a 180º C.

Coloca los pimientos rojos en una fuente y echa por encima un chorro de aceite de oliva virgen extra, no te dé apuro, porque tienen que quedar «mojados» en aceite.

pimientos rojos listos para meter en el horno

Después echas la sal gorda por todos los lados del pimiento, que se quedará algo pegada por el aceite que has echado antes.

Cuidado aquí, que ya sabes que no hay que abusar de la sal.

Una vez están los pimientos rojos con el aceite y la sal los metes en el horno a 180ºC y los irás dando la vuelta según vayas viendo que se van tostando y se van reblandeciendo en cada uno de sus lados, tal y como aparece en la imagen.

pimientos rojos asados - dar vueltas en el horno

Dependerá de cada horno, pero más o menos cada 20 minutos tendrás que darle la vuelta, que por la forma que suelen tener los pimientos rojos, serán 4 veces o 3 como poco.

Una vez están los pimientos rojos asados por todos los lados, apagamos el horno y los sacamos y dejamos que enfríen un poco, porque lo siguiente que tenemos que hacer es pelar los pimientos y quitarle el corazón con todas las pepitas.

pimientos rojos asados acabados

Según vamos pelando los pimientos los vamos haciendo tiras con los mismos dedos y los vamos dejando en una bandeja, taper o fuente.

pimientos rojos asados - pelando y cortando

Mira que donde los vayas a dejar tenga algo de fondo, porque según vayas dejando los pimientos rojos irán soltando líquido, además de añadirles un poco más de salsita de la que soltó en la fuente donde los asaste.

Una vez ya tengamos todos los pimientos rojos pelados y cortados, como hemos dicho, le añadiremos un poquito más de la salsa de la que soltaron al asarlos, más o menos hasta que los cubra y después echaremos un chorrito de vinagre.

La cantidad de vinagre a echar irá acorde a tu gusto y el de tus comensales, pero no abuses mucho, porque te podrían quedar muy fuertes de sabor y buscamos que queden más bien suaves.

Lo movemos todo y lo ponemos a enfriar en la nevera y ya solo queda esperar a que enfríen para que se puedan comer, porque es como más ricos están, fríos.

Un apunte sobre el tiempo en la nevera… Si los haces al mediodía, por ejemplo, perfectamente los podrás servir por la noche para cenar ¡Estarán en su punto la mar de buenos!

pimientos rojos asados listos para servir

Una receta de verduras muy rica y muy sencilla de hacer.

Por cierto, si les quieres dar otro toque de sabor, a la hora de hacer los pimientos rojos puedes añadir uno o dos tomates naturales, a los que tendrás que lavar también y darles una vuelta en alguna de las veces que des la vuelta a los pimientos, para evitar que se quemen.

Una vez estén hechos… también deberás pelar los tomates y hacerlos trocitos pequeños.

Mezcla bien todo, aprovechando cuando le echas el vinagre.

Esta mezcla queda también muy rica y sabrosa.

¡Qué aproveche!